¿Qué es la leucoplasia?
La leucoplasia es una lesión predominantemente blanquecina que no desprende al raspado. Aparece en la cavidad oral, específicamente la mucosa, la lengua o las mejillas y no puede ser caracterizada como otro tipo de lesión. Puede considerarse, en alguna ocasiones, como una lesión precancerosa, lo cual debe confirmarse con pruebas analíticas a través de una biopsia. Sin embargo, su presencia no es indicador certero de cáncer oral.
¿Qué provoca una leucoplasia?
La causa exacta de la leucoplasia es desconocida. Sin embargo, está su aparición está muy asociada a varios factores de riesgo, tales como:
- Morder tabaco
- Consumo excesivo de tabaco y alcohol
- Infección por el virus del papiloma humano (VPH)
- Irritación crónica (por fracturas o prótesis mal ajustadas)
¿Cuáles son los signos y síntomas?
Generalmente, la leucoplasia es una lesión indolora, por lo cual puede pasar desapercibida en sus estadios iniciales. Sin embargo, se puede identificar con algunos signos que aparecen en las mejillas, las encías, la mucosa, el piso de la boca o la lengua:
- Parches vellosos
- Parches abultados de color rojizo
- Parches blanquecinos o grisáceos que no desprenden al raspado o a la limpieza
- Parches o manchas de diferentes texturas, como irregular, plana, definida o arrugada
¿Cómo se quita la leucoplasia?
El tratamiento de la leucoplasia depende de las características de la lesión y de su causa subyacente. El primer paso es eliminar los factores desencadenantes (si los hay), como el tabaco y el alcohol; así como la irritación local causada por prótesis mal ajustadas o dientes fracturados. Es indispensable hacer chequeos regulares para examinar el estado de los tejidos y asegurarse que la lesión haya desaparecido.
En los casos que la leucoplasia persista luego de transcurridas 4 semanas o que se sospeche de una lesión premaligna, se procede con la realización de una biopsia para analizar el tipo de tejido y definir plan de tratamiento, el cual podría incluir una extirpación quirúrgica de la lesión.
