La enfermedad de las encías consiste en una inflamación del tejido y del hueso que sostiene a los dientes, provocada por la acumulación de placa.
La placa es una capa pegajosa formada por los gérmenes que se acumulan en los dientes y encías. Las bacterias de la placa fabrican toxinas que causan irritación en las encías.
Esta enfermedad puede ser hereditaria, por lo que sufrirán más riesgos aquellas personas cuyos padres la padezcan. Además nuestros hábitos diarios también inciden, como ingerir alimentos ricos en azúcar y almidón, llevar ortodoncia, fumar o una deficiente higiene dental.
Evolución de la enfermedad de las encías
La enfermedad avanza por varias etapas bien reconocidas:
- Gingivitis: Es la primera etapa, las encías se vuelven mas sensibles y se produce un sangrado, además de enrojecidas y sufrir cierto dolor al tacto. Si la placa que cubre los dientes no se elimina, se forma una costra dura llamada sarro.
- Periodontitis: Al formarse sarro, este empieza a destruir tejido de la encía, provocando sangrado y haciendo que los dientes se separen.
- Periodontitis avanzada: Cuando se lesiona el tejido más profundo de las encías, puede transmitirse al hueso que sostiene los dientes. Esto puede hacer que los dientes se aflojen y se caigan.
Síntomas y tratamiento
Se trata de una enfermedad difícil de detectar ya que puede no provocar dolor o poco dolor antes de ocasionar lesiones más graves. Por esta rezón es muy importante acudir a visitar periódicas con nuestro dentista de confianza.
La Dra. Marta Pascual, Dentista de Confianza en Las Rozas, de la Clinica Dentall nos explica que es importante acudir al dentista si padeces cualquiera de estos síntomas:
- Sangrado de las encías que ocurre con regularidad al cepillarse los dientes o al usar hilo dental.
- Cambio en el color de las encías (unas encías sanas se deben ver rosadas y firmes, no rojas, hinchadas ni sensibles).
- Cualquier signo de que las encías se separan de los dientes.
- Mal aliento que no remite.
- Dientes sueltos.
Para tratar la enfermedad es fundamental adoptar hábitos de higiene dental saludables, como cepillarse bien los dientes y usar hilo dental. Cuando existe una infección generalizada de las encías, se requiere tratamientos especiales como el raspado reticular, cirugía de las bolsas de las encías afectadas o uso de antibióticos.
